Primeros Pasos

Esta Política Ambiental es compatible con la certificación ISO 14001, entre otras, debería establecer y mantener el propósito, la misión, la visión y los valores de la organización. Estos deberían ser claramente entendidos, aceptados y apoyados por las personas de la organización y, según sea apropiado, por otras partes interesadas.
Tras esta declaración de compromisos, el siguiente paso hacia la sostenibilidad y la mejora continua es realizar un Diagnóstico Ambiental que puede ser utilizado para dar los primeros pasos hacia la implantación de un sistema de gestión ambiental ISO 14001 o Reglamento EMAS. En este diagnóstico ambiental se identifican los principales impactos ambientales que la organización posee y se recomiendan acciones para su control ambiental y Guías de buenas prácticas ambientales. Además, se identifican las obligaciones legales ambientales que posee una organización y se proponen soluciones para su cumplimiento. A este diagnóstico para la identificación y evaluación del cumplimiento de requisitos legales también se nos contrata bajo la denominación de Due Diligence Ambiental.
Para todos aquellos que requieran de la necesidad de cumplir con la Ley 7/2022, de 8 de abril, de
residuos y suelos contaminados para una economía circular y con la Ley 26/2007 de Responsabilidad
Medioambiental, podemos ayudarles en el Análisis de riesgos ambientales y la contratación de la
garantía financiera para externalizar los riesgos.
Beneficios de dar los primeros pasos hacia la sostenibilidad contando con una Política Ambiental, un Diagnóstico Ambiental o Due Diligence Ambiental, y Guías de buenas prácticas ambientales:
- Puntos extra frente a tu competencia, en procesos de homologación y selección de proveedores de cuentas privadas y concursos públicos según la Ley 9/2017, de 8 de noviembre, de Contratos del Sector Público.
- Reduce riesgos de incumplimiento legal, multas y sanciones.
- Promueve la mejora continua y la maximización de la huella ambiental positiva.
- Permite estar a la vanguardia y cumplir más fácilmente con la legislación de la industria en continua evolución.
- Mejora la eficiencia de los procesos.
- Ayuda a rendir cuentas no financieras en materia de sostenibilidad.
- Ayuda a contribuir a la Agenda 2030 y sus ODS.